Por Román Flores
EL CENTRO – Dos camionetas llenas de pasajeros llegaron al Hotel Travelodge una tarde de jueves reciente. Las familias, visiblemente cansadas, en su mayoría de Centro y Sudamérica, salieron de las camionetas abrazando unas cuantas pertenencias.
Algunas personas estaban ahí para darles la bienvenida y dirigirlos a unos salones en donde madres y padres comenzaron el proceso para reunirse con sus seres queridos a lo largo del país.
Las familias estaban legalmente en el país tras ser admitidos por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos. Fueron transportados al hotel, donde personal de Caridades Católicas de San Diego estaban listos para recibirlos con los “brazos abiertos”.
“Brazos abiertos” es el programa de la organización católica que desde el pasado Domingo de Pascua está brindando ayuda a familias que buscan asilo en este país. Un total de 11 miembros del personal los reciben siete días de la semana en el hotel de El Centro. Atienden las necesidades inmediatas de los migrantes- ofreciéndoles alimentos y alojamiento temporal, entre otras cosas- y les ayudan a coordinar su viaje para reunirse con sus familiares y amigos a lo largo del país.
En las primeras tres semanas del operativo en El Centro, la organización había recibido y coordinado el viaje de 350 hombres, mujeres y niños, desde bebés hasta adolescentes.
“Se espera que ese número siga aumentando”, dijo Appaswamy “Vino” Pajanor, Director Ejecutivo de Caridades Católicas, parte de la Diócesis de San Diego.
La organización puso manos a la obra en marzo cuando el Departamento de Servicio Social de California les pidió apoyo para ayudar a los inmigrantes que estaban siendo liberados por las autoridades, buscan seguridad y protección en Estados Unidos mientras se preparan para solicitar asilo en cortes federales de inmigración.
Caridades Católicas está tomando la iniciativa ofreciendo este servicio en el Valle Imperial. Mientras tanto, en el Condado de San Diego la organización está apoyando a Servicio Familiar Judío, organización de servicio social encargada del programa. Desde el 22 de marzo, Caridades Católicas aumentó su personal para poder ofrecer ese apoyo. Un total de 16 personas han sido contratadas temporalmente para ayudar a procesar a las familias migrantes en San Diego.
La Directora Ejecutiva y presidente nacional de Caridades Católicas USA, la Hermana Donna Markham, visitó esta frontera a principios de abril para observar de primera mano la situación. En una entrevista comentó que esta labor “viene directamente del Evangelio”.
“Jesús nos dice que debemos cuidar a los menos privilegiados entre nosotros – las viudas, huérfanos y extraños; las personas que son pobres y sufren”, señaló. “Siempre debemos estar abiertos a la hospitalidad y misericordia para aquellos que más nos necesitan, y eso es lo que Caridades Católicas hace”.
La Hermana alabo el esfuerzo local para ayudar a los migrantes.
“Estoy muy impresionada con la calidad de atención que se le está proporcionando a las personas cuando salen de la detención”, dijo.
La primera parada que hacen los migrantes al ser liberados es en Imperial Valley College, donde se les hace la prueba de COVID-19. Quienes resultan negativos son transportados al hotel. Ahí, la organización les proporciona una habitación donde pueden bañarse y descansar. Reciben también alimentos, ropa limpia y artículos de bebé, incluyendo pañales.
Los inmigrantes están hambrientos de información.
“Conforme van llegando te vas dando cuenta de que tienen muchísimas preguntas”, dijo Pajanor.
Mientras esperan para continuar su camino a su destino final, el personal de Caridades Católicas les da un curso intensivo sobre la forma de vida en los Estados Unidos.
Pajanor comentó que alrededor del 99 por ciento de los inmigrantes buscan reunirse con sus familiares o amigos en alguna otra parte del país. Agregó que, si las personas que los van a recibir no tienen los medios para pagar por ese viaje, Caridades Católicas busca la manera de cubrir los gastos. Por si fuera poco, la agencia trata de darles un poco de dinero en efectivo para sus alimentos a los migrantes que van a viajar en camión.
La agencia está pidiendo donativos en efectivo o donación de millas aéreas a través de Miles4Migrants.org.
Pajanor dijo que este programa es uno de los más grandes esfuerzos en la historia de la organización.
“Caridades Católicas está cumpliendo su misión, mencionada en Mateo 25 – dar de comer al hambriento, vestir al desnudo – es por eso que hacemos esto”, señaló. “Si, es más complicado ahorita con el COVID-19, pero somos el país de la esperanza y la libertad…Si nosotros nos les damos esperanza, ¿entonces quien lo hará?”.
Visita ccdsd.org para hacer un donativo monetario, y el sitio miles4migrants.org para donar millas aéreas para ayudar a los solicitantes de asilo.