SAN DIEGO — Las comunidades fronterizas se prepararon para una gran afluencia de migrantes que intentaban cruzar la frontera para buscar asilo después de que venciera el Título 42 el pasado 11 de mayo. Eso no se materializó en los días posteriores a la finalización de la política, aunque la situación se mantuvo fluida.
Estados Unidos usó el Título 42, una política que comenzó al comienzo de la pandemia, para rechazar a millones de inmigrantes que planeaban buscar asilo.
En la Diócesis de San Diego, “Caridades Católicas asiste a solicitantes de asilo, cumpliendo así con su misión de ayudar a los más vulnerables, tratándolos con misericordia”, dijo Vino Pajanor, director ejecutivo. Durante dos años la organización ha operado tres albergues a lo largo de la diócesis para recibir a estos migrantes, trabajando en conjunto con otras organizaciones no-lucrativas.
“En ese tiempo hemos ayudado a casi 20 mil personas provenientes de diferentes países, la mayoría de ellos mujeres y niños”, comentó.
La organización tiene un total de 1,500 camas disponibles para recibir a los migrantes de los condados de San Diego e Imperial, y está en contacto continuo con autoridades de todos los niveles.
El personal de los albergues recibe a los migrantes, quienes han sido liberados por las autoridades estadounidenses y se encuentran legalmente en el país para presentar su caso de asilo. Se aseguran de que a los migrantes se les realice un examen de salud, les brindan alojamiento y comida, y coordinan sus viajes a otras partes del país para conectarse con sus seres queridos. Los migrantes suelen partir uno o dos días después de haber llegado a los albergues, que son financiados principalmente con fondos estatales.
En el condado de San Diego los solicitantes de asilo cruzaron la frontera de manera ilegal días antes de que venciera el Título 42. Caridades Católicas respondió a un llamado de ayuda en el pueblo de Jacumba, dijo Pajanor. Cientos de migrantes -hombres, mujeres y niños de diferentes países – habían montado campamentos improvisados en un lugar remoto en el este del condado. No contaban con nada que los preparara para las frías noches y cálidos días, estaban desesperados y necesitaban ayuda mientras esperaban para poder entregarse a agentes de migración.
El 12 de mayo, miembros de un equipo de Caridades Católica llevó alimentos y agua a los migrantes, dijo Pajanor, quien también estuvo presente ese día.
El cardenal Robert W. McElroy acompañó al equipo. Visitó el campamento para ver la situación de primera mano y ofreció una bendición a los migrantes.
Tres días más tarde, los agentes de la Patrulla fronteriza comenzaron a trasladar a los migrantes a centros de detención.
Cómo Ayudar
Caridades Católica necesita de manera urgente:
– Voluntarios para ayudar de diversas maneras en los albergues para migrantes. Para registrarse visite: https://bit.ly/3yKzdgt
– Ropa en buen estado, incluyendo ropa de hombre y zapatos de cualquier género y talla. Los donativos pueden entregarse de lunes a viernes entre 8 a.m. y 5 p.m. en 4575 Mission Gorge Place, San Diego 92120.
– Donativos monetarios de cualquier cantidad, los cuales pueden hacerse en el sitio: www.ccdsd.org
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Cómo Ayudar
Caridades Católica necesita de manera urgente:
– Voluntarios para ayudar de diversas maneras en los albergues para migrantes. Para registrarse visite: https://bit.ly/3yKzdgt
– Ropa en buen estado, incluyendo ropa de hombre y zapatos de cualquier género y talla. Los donativos pueden entregarse de lunes a viernes entre 8 a.m. y 5 p.m. en 4575 Mission Gorge Place, San Diego 92120.
– Donativos monetarios de cualquier cantidad, los cuales pueden hacerse en el sitio: www.ccdsd.org
