“Encantado”. “Emocionado”. “¡Bendito Dios!”
De esta manera reaccionaron algunos sacerdotes y feligreses al enterarse de que una vez más se permiten las Misas al interior.
Muchas parroquias católicas de la localidad ya regresaron a esta modalidad, tras una decisión de la Suprema Corte de los Estados Unidos emitida el pasado 5 de febrero, que permite la adoración pública en el interior de las parroquias, siempre y cuando la ocupación no supere el 25 por ciento de la capacidad del edificio, se utilicen cubrebocas y se mantenga el distanciamiento social. Sin embargo, se sigue prohibiendo la participación del coro.
“Estoy encantado de que la Corte haya dado este paso en el que se abren más opciones para la adoración religiosa, reconociendo igualmente los imperativos de salud que se requieren en este momento”, dijo el Obispo Robert McElroy.
El Obispo autorizó a los sacerdotes a tomar sus propias decisiones sobre las Misas y otras liturgias que se realizarán al interior. La mayoría de ellos están realizando las Misas al día al interior y las Dominicales al exterior. Algunas parroquias continúan teniendo todos sus servicios al exterior. Y casis todas continúan ofreciendo Misas en línea.
El Monseñor Dennis Mikulanis dijo que poder celebrar la Cuaresma y Pascua dentro de la parroquia representa una “maravillosa diferencia” al año pasado, cuando se suspendieron todas las liturgias públicas.
“Las Misas de Pascua nos aseguran una nueva vida”, comentó el sacerdote de la Parroquia San Rafael. “Este regreso al interior (de las parroquias) es como una flor brotando del suelo”.
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