Por Carol Glatz
CIUDAD DEL VATICANO — La segunda sesión del sínodo sobre la sinodalidad, que reunirá a 368 obispos, sacerdotes, religiosos y laicos en el Vaticano, incluido el Cardenal Robert W. McElroy, de la Diócesis de San Diego, se llevará a cabo del 2 al 27 de octubre.
En julio, el Vaticano publicó un documento sobre lo que se discutirá durante la segunda sesión del sínodo. El documento señala que el sínodo debe impulsar a la Iglesia a convertirse en un “refugio” para los necesitados y animar a los Católicos a “dejarse guiar por el Espíritu del Señor hacia horizontes que no habían vislumbrado previamente” como hermanos y hermanas en Cristo.
El documento servirá como guía para reflexionar sobre el tema: “Cómo ser una Iglesia sinodal misionera” que se analizará en esta segunda sesión. Las reflexiones son el siguiente paso en el tema general del sínodo: “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”.
Dos desafíos clave que enfrenta la Iglesia son “el creciente aislamiento de las personas y el individualismo cultural, que incluso la Iglesia ha absorbido a menudo”, dice el documento.
Sin embargo, la práctica sinodal “nos llama a la atención mutua, interdependencia y corresponsabilidad por el bien común”, añade, y está dispuesta a escuchar a todos, a diferencia de métodos “en los que la concentración de poder silencia las voces de los más pobres, los marginados y las minorías”.
El documento alienta a la “renovación de la vida litúrgica y sacramental, comenzando con celebraciones litúrgicas que sean bellas, dignas, accesibles y totalmente participativas; capaces de nutrir el impulso hacia la misión”.
Mientras que la segunda sesión se centrará en ciertos aspectos de la vida sinodal, “con vistas a una mayor eficacia en la misión, otras cuestiones que surgieron durante el camino son objeto de un trabajo que continúa realizándose de otras formas, a nivel de las Iglesias locales, así como en los diez grupos de estudio”, dice el documento.
En marzo, el cardenal Mario Grech, secretario general del Sínodo de Obispos, anunció que el Papa Francisco había decidido que algunos de los temas más controversiales planteados durante el proceso sinodal 2021-2024 serían examinados por los grupos de estudio. Entre los temas asignados a los diez grupos están la posible revisión de las directrices para la formación de sacerdotes y diáconos, el papel de las mujeres en la Iglesia y su participación en los procesos de toma de decisiones y liderazgo comunitario, una posible revisión en la forma en que se eligen los obispos y una revisión de las normas para la relación entre los obispos y las órdenes religiosas que trabajan en sus diócesis.
Los grupos de estudio completarán su análisis en profundidad para junio de 2025, si es posible, pero ofrecerán un informe de progreso a la asamblea del sínodo en octubre de 2024, según el documento.
También se menciona que en esta segunda sesión se continuará con el método sinodal de “oración, intercambio y discernimiento” mientras se invita a los participantes a observar “la vida sinodal misionera de la Iglesia desde diferentes perspectivas” al reflexionar sobre tres aspectos que surgieron de discusiones previas: relaciones dentro de la Iglesia, caminos para la formación y lugares de conexión.
“Sobre esta base, se redactará un documento final relativo a todo el proceso y se ofrecerán al Papa propuestas sobre los pasos que se podrían tomar”, se añade.
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