SAN DIEGO— El año pasado alrededor de 11 mil personas de la diócesis participaron en sesiones de grupos pequeños en sus parroquias y colegios, y más de 27 mil respondieron una encuesta. Esas voces, expresaron la alegría que les da participar en la vida sacramental de la Iglesia. ¿Cómo construir sobre esa alegría? ¿Cómo invitar a más personas a experimentarla?
La diócesis explorará esas preguntas en la siguiente etapa de nuestro viaje sinodal. En otoño las parroquias organizarán otra ronda de sesiones de diálogo en grupos pequeños, en esta ocasión se enfocarán en cómo construir comunidades eucarísticas de manera más eficaz en nuestras parroquias.
El cardenal McElroy ha incorporado elementos del Avivamiento Eucarístico Nacional, organizado por la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos, en este proceso.
Las sesiones de diálogo se llevarán a cabo del 1 al 31 de octubre y se realizarán con un formato similar al que se utilizó en las sesiones anteriores. En estas sesiones los participantes se sentaron en pequeños círculos y compartieron sus experiencias con sus compañeros, quienes escuchaban atentamente. Al término de la sesión gran parte de los participantes aseguraron haber disfrutado de la experiencia y expresaron su deseo de que su parroquia continuara realizándolas.
El sínodo es una conversación de cuatro años en todos los niveles de la Iglesia Católica que analiza cómo ser una Iglesia más acogedora.
Para ello las parroquias, diócesis y hasta la misma Iglesia buscan desarrollar una cultura que escuche de manera consistente a todos los miembros de la comunidad, aprenda de sus experiencias y satisfaga sus necesidades.
El objetivo del sínodo es renovar y revitalizar a la Iglesia a través de nuevas conversaciones, especialmente sobre temas desafiantes; escucharnos unos a otros para después trabajar juntos y abordar las necesidades identificadas.
El Papa Francisco lanzó el sínodo en octubre de 2021, llamando a todas las diócesis a organizar encuentros entre miembros de la comunidad, especialmente aquellos alejados de la Iglesia, para escucharse unos a otros mientras compartían sus sentimientos sobre la Iglesia.
Las diócesis organizaron sesiones de grupos pequeños en sus parroquias y presentaron sus hallazgos a las conferencias nacionales de obispos en verano de 2022. Esas conferencias, por su parte, presentaron un resumen de estos hallazgos al Vaticano, en donde se reunirán todos los obispos este octubre y el del 2024 para revisar esos hallazgos y hacer recomendaciones al Santo Padre.
La diócesis de San Diego, encabezada por el cardenal McElroy, ha organizado el sínodo en tres fases. Durante la fase de escucha, de octubre de 2021 a octubre de 2022, la diócesis realizó sesiones de grupos pequeños en parroquias, escuelas y otros lugares y luego realizó una encuesta electrónica para escuchar a la mayor cantidad de personas posible.
Siguió una fase de discernimiento, de octubre a diciembre de 2022, donde los miembros de la comisión sinodal, en su mayoría líderes laicos, revisaron los hallazgos de las sesiones grupales y la encuesta. Estos hallazgos fueron compartidos con la comunidad.
En enero la diócesis inició la fase de acción, en dónde se les pidió a los párrocos implementar dos cambios en sus parroquias como respuesta a las necesidades que sus parroquianos expresaron en las sesiones de grupo y la encuesta.
El proceso sinodal, sin embargo, es un proceso de trabajo continuo. Es por ello que las discusiones en grupos pequeños regresarán a las parroquias y escuelas en octubre.
Para más información sobre el sínodo visite: sdcatholic.org/sinodo.
