SAN DIEGO — ¿Quién dices que soy yo?
El cardenal Robert W. McElroy reflexionó sobre esta pregunta durante una Misa especial el 14 de septiembre en la Parroquia de San Gregorio Magno en la que se habló sobre el Cuidado de la Creación.
La pregunta no es sólo para los Apóstoles, dijo en su homilía. “Es una pregunta qué va dirigida a cada uno de nosotros”.
Agregó que la respuesta tiene dos dimensiones.
“La primera está en nuestras vidas espirituales, no en un sentido abstracto, sino profundamente en nuestros corazones y almas. ¿Quién creemos que es Jesús? ¿A quién abrazamos cuando abrazamos a Jesucristo?”
La segunda, dijo, es: “¿Cómo reflejan mis acciones en el mundo quién es Jesús para mí y qué significa eso en nuestras vidas morales y en cómo tratamos al prójimo?”
Compartió una historia sobre Ruanda, un país abrumadoramente Católico que alberga dos tribus con una relación adversaria que se remonta a la época colonial: la mayoría Hutu y los Tutsi. En 1994, la muerte del presidente Hutu dio lugar a teorías de conspiración y, en última instancia, a la horrenda masacre por parte de los Hutu de más de 800 mil Tutsi, incluyendo hombres, mujeres y niños.
Sin embargo, un sacerdote en una parroquia en Kalongo había pedido a la gente que entendieran el verdadero discipulado y vivieran de acuerdo con esos valores, comentó el Cardenal.
La mayoría de los Hutus en la parroquia, liderados por un grupo de oración carismático, decidieron proteger a todos los Tutsi en su comunidad, reuniéndolos en el templo.
“Si van a matarlos, tendrán que matarnos a nosotros ambién”, dijo el Cardenal que los Hutus le dijeron a los atacantes.
“Se le llama el ‘Milagro de Kalongo’, porque no murió ni una sola persona durante ese terrible tiempo, ya que los Hutus habían internalizado la comprensión de lo que nosotros, como cristianos, estamos llamados a ser en términos de quién decimos que es Jesús… y cómo debemos actuar en el mundo”.
Luego, el Cardenal habló sobre el don de la creación de Dios.
“La espiritualidad de la creación nos llama a ver toda la belleza que Dios nos ha otorgado, todas sus maravillas, y las maneras en cómo nos da la posibilidad de vivir con dignidad”.
Habló sobre la segunda dimensión del cuidado de la creación, “entender que Dios nos llama a proteger, disfrutar, comprender la gloria de la creación que nos rodea y la cual está en peligro”.
“Eso es lo que celebramos en esta Misa el día de hoy. Es de la misma manera que el pueblo de Kalongo celebró esas dos preguntas: ‘¿Quién creemos que es Jesús para mí? ¿Qué significa eso y cómo lo vivo realmente en mi vida en el mundo?’”
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