Por el Padre Bernardo Lara
Tristemente, he notado que últimamente se vive un ambiente algo negativo en las personas. Entiendo que este año 2020 ha sido muy raro y nos ha estado “sorprendiendo” con retos como si fuera el fin del mundo. De igual manera, se entiende que consecuentemente esto nos cause estrés y de más.
Pero el problema es que nos estamos dejando conquistar por este ambiente negativo y, peor aún, lo estamos alimentado y fomentando. Muy seguido estas son señales de que algo esta mal dentro de nosotros y para muestra un ejemplo: La fiebre.
Cada vez que nos da fiebre, es un síntoma de que algo anda mal dentro de nosotros. La fiebre es un signo externo, un signo por fuera (la piel a alta temperatura) que nos muestra que dentro de nosotros tenemos algo mal, como la gripa, un virus, una infección etc.
Así mismo pasa con estos momentos de dificultad. Sí, es cierto que son tiempos difíciles, pero si todo lo veo negativo entonces ese es un síntoma de que algo anda mal en mi vida espiritual. Más aún, por diferentes medios me he enterado de muchas personas que se la pasan viendo “el vaso medio vacío” de la vida. Se quejan por todo: Que no hay trabajo, que tienen que usar cubreboca, que tienen que quedarse en casa, que la Misa es muy cortita, que no hay música en la Misa, que se tiene que recibir la Eucaristía en la mano, que después de la Comunión se tienen que ir, que si el Papa hace esto o aquello…
De verdad que llama la atención la reacción de muchas personas que literalmente se quejan de todo.
Esto nos debe poner a reflexionar. Parecido a la fiebre, este es un signo que refleja qué hay algo mal dentro de mí. Si por fuera me la paso viendo cosas negativas y quejándome, entonces quizás la vida no es el problema, quizás el problema esta en mi corazón.<new tagline>
El Padre Bernardo Lara es sacerdote en la Diócesis de San Diego y co-conductor del programa dominical de radio “Vive Feliz” por Amor 102.9 FM a las 8 a.m. y en vivefelizsd.org.
